Érase una vez un niño que se llamaba Manolo e iba a regar las flores del campo.
Entonces se puso a llover y las plantas se murieron, ¿sabes por qué?, porque primero las habia regado.
Y después salió el arcoiris y el sol. Y las plantas florecieron porque el calor secó el agua que sobraba.
FIN
Muy buena historia sobre la primavera
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